
El guardameta Ricardo, otrora internacional con Portugal, se divorció del Real Betis de la Liga Adelante por no colmar las expectativas de la directiva. Su rendimiento no convencía, es verdad, aunque también podría tratarse de un conflicto más profundo. "Es el día más triste de mi carrera deportiva", expresó el finalista de la Eurocopa 2004 y la UEFA 2005.
Se despidió con un nivel de juego inferior al que mostró en Sporting Lisboa y en el Betis durante 2007 y 2008. De ahí que, en los últimos tiempos, había sido reemplazado tanto por Casto como por Goitia, dos porteros que a priori parecían estar muchos peldaños por debajo del luso. Ricardo se quedó sin un lugar en el once inicial. ¿Banquillo? No. Desvinculación y un "muchas gracias" con aroma a pescado.
El Betis ya oficializó la separación. Y el meta tradujo su malestar. "He querido venir a despedirme de la afición para devolver el cariño que me han mostrado todos estos años. Es el día más triste de mi carrera deportiva, nunca había pasado por momentos tan difíciles. No he visto una afición igual en mi vida", señaló el oriundo de Montijo, según transcribió Eldesmarque.es este jueves.
"No he podido triunfar en este club con lo grande que es, pero el Betis tiene a un aficionado más y espero estar aquí en junio para celebrar el ascenso", cerró Ricardo.